Siempre me han gustado los comics y recuerdo muy bien que el primero que leí fue «Asterix y Cleopatra»; también recuerdo que leí algunos números sueltos de «El Hombre-Araña» (recuerdo muy bien haber leído el origen de Venom; pero ignoro dónde habrá quedado ese número…), «Karmatrón y los Transformables» y de «Las tortugas ninja». Sin embargo, no fue sino hasta que empecé a leer «Spawn» que verdaderamente me enganché en los comics.  Compré el número 1 del cómic de Spawn en mayo de 1997 en un puesto de periódicos cuando salía de la primaria. Me maravilló porque no se parecía a nada que hubiera visto antes. Salvo contadas excepciones, nunca he sido muy afecto a los súper héroes; pero esta reinterpretación de Fausto me atrapó de inmediato. El arte, el color ‒Spawn fue el primer cómic en ser coloreado enteramente de manera digital‒, la historia sobre un antihéroe que era un mercenario de élite resucitado como un guerrero del Infierno, todo estalló en mi mente preadolescente y me enganchó irremediablemente. A la fecha, es el único cómic del que he coleccionado y leído todos los números ‒al menos todos los que se han publicado en nuestro país‒ sin falta.

    Y digo, sé que nunca fue tan tan genial; pero sí hubo una época de esplendor y sí se entiende por qué fue punta de lanza en la revolución de los cómics independientes a finales de los 80 y principios de los 90. También es comprensible por qué ‒aunque quizá después perdió el rumbo‒ en los 90 Todd McFarlane, creador de Spawn, fue uno de los grandes visionarios no sólo de los cómics; sino de la industria del entretenimiento en general.

   1997 fue el año de Spawn. En primavera, el cómic se introdujo fuera de EE.UU.; en verano, se estrenó la película de Live-Action y en otoño se estrenó la serie de dibujos animados para adultos transmitida por el canal premium de TV por cable, HBO.

    La primera parte de este artículo conmemorativo será la crítica de la película de Live-Action.

 SPAWN

 

Mark A.Z. Dippé, 1997

Primero que nada, hay que entender que el mundo en 1997 era muy diferente de lo que es hoy. Las películas de superhéroes aún no se habían apoderado del mainstream y eran una cosa poco común, un terreno prácticamente inexplorado. Las dos principales franquicias de cómics en la pantalla grande estaban muerta y enterrada la una ‒Superman‒ y a punto de suicidarse la otra ‒Batman‒. Los efectos especiales generados por computadora estaban apenas en una etapa experimental y eran una cosa casi tan de Ciencia Ficción como las películas que los utilizaban.

    En este mundo en el que la humanidad aún no había sido esclavizada por las tabletas electrónicas y en el que había que esperar horas para poder ver porno en Internet, se estrenó Spawn; una película independiente de mediano presupuesto, distribuida por una compañía semi-independiente ‒aunque en ese entonces New Line Cinema ya era parte de Warner Bros., mantenía su autonomía‒ basada en un exitoso cómic independiente que buscaba hacerse un lugar entre los grandes. Pero ¿lo lograría?

     El argumento de la película sigue más o menos fielmente el primer arco argumental del cómic y narra la historia de Al Simmons (Michael Jai White), un asesino de élite del gobierno estadounidense quien, durante una misión en el Lejano Oriente, es traicionado por su jefe, el malvado Jason Wynn (Martin Sheen, porque pues hay que pagar la renta) y su compañera de escuadrón, la letal asesina Jessica Priest (la guapa Melinda Clarke, a quien seguro recuerdan como la novia resucitada en El regreso de los muertos vivientes III [Yuzna, 1993]), quienes lo queman vivo. Simmons reaparece cinco años después en la sección de los callejones de Manhattan conocida como Rat City ‒que es habitada por la legión de indigentes más increíblemente limpios que he visto jamás en una película‒ transformado en un Hellspawn, uno de los soldados de élite del ejército del Infierno. Mientras Spawn se aferra a los últimos restos de humanidad que le quedan y trata de recuperar su vida anterior, encontrará a Cogliostro (Nicol Williamson), un misterioso anciano que intenta ayudarlo a aprender a usar sus nuevos poderes y se enfrentará a Payaso (John Leguizamo, háganle un favor y no lo recuerden por la película de Super Mario Bros.[Jankel y Morton, 1993]), la forma humanoide del voraz demonio Violator, quien tratará de forzarlo a usar sus poderes en beneficio del Infierno.

    ¿Por dónde empiezo? Bueno, la mayoría de las películas comienzan con un guión, así que creo que será mi punto de partida también. ¿Qué pedo con el guión de esta madre? La narrativa es súper atropellada, deja huecos en elementos clave ‒a menos que uno le esté poniendo mucha atención o que ya conozca la historia de antemano, resulta un poco difícil entender cómo es que Spawn se convierte en tal, tuvieron que añadir una escena narrativa de Cogliostro en la que explica su misión porque originalmente no se entendía, etc.‒, y está plagada de diálogos terribles y acartonados al punto de lo chicloso. Los chistes de Payaso son cada uno peor que el anterior y, aunque en general no me molestan demasiado los clichés, esta película los tiene por todos lados.

    Pero vamos, eso no es problema porque los actores rescatan la película, ¿no? No, tristemente, no. Las actuaciones de todos y quiero decir absolutamente todos, son terribles. Si dije que la peli está plagada de clichés, es porque éstos se dejan ver incluso en la actuación. White está todo el tiempo en su papel de héroe rudo y es incapaz de matizar sus líneas de por sí malas, Sheen escupe mal un texto que se ve que ni él mismo se lo cree y Leguizamo… el actor colombiano da auténtica lástima, pues en pantalla se ve su sufrimiento al estar luchando contra el pésimo maquillaje prostético y el guión horrible para poder hacerse el gracioso en cada oportunidad posible y fracasando miserablemente. Y Williamson brinda una interpretación digna de una pastorela de secundaria, encima de lo cual, se rehusó a dejarse crecer la barba o a usar una postiza para parecerse más a su personaje.

    Digo, sé que el personaje de Payaso debe ser molesto y decir malos chistes; pero en su traslación a la pantalla grande simplemente no funciona. No es que Leguizamo sea mal actor ‒por el contrario‒, no es que el maquillaje en sí mismo esté particularmente mal hecho ‒o sea, sí está mal; pero he visto peores en películas actuales‒… es que el personaje desde su planteamiento en el guión está mal y el director ‒un reconocido artista de efectos visuales‒ no tuvo la habilidad para ver que, en su conjunto, los elementos del personaje no se estaban articulando.

    Sin embargo, estos problemas suelen ser comunes en las películas de acción y quizá me estoy ensañando con ésta. Finalmente, la idea de esta peli es que sus efectos especiales la convirtiesen en un deleite visual. De hecho, el proyecto originalmente tuvo un presupuesto de 20 millones de dólares que, en poco tiempo, se duplicó. De los 40 millones que costó la película finalmente, cerca de la tercera parte fueron para efectos especiales… y se me hace que un político mexicano les armó el presupuesto, porque ni un centavo de él se ve en pantalla.

    Por primera vez en el tiempo que llevo criticando películas estoy en completo desacuerdo con el fallecido Roger Ebert, quien dice de esta película que contiene “algunos de los efectos especiales más impresionantes que he visto” y que “Como una experiencia visual, Spawn es simplemente inolvidable”[1]. Lo que no puede sino dejarme pensando qué película habrá visto Ebert… digo, es una experiencia visual inolvidable, eso sí, pero por horrible. Recuerdo muy bien que cuando vi esta peli por primera vez fue en 1997 en una copia pirata en VHS y creí que se veía tan mal por la pésima calidad del video. Por desgracia, cuando conseguí una copia en DVD, descubrí la verdad.

    Al CGI utilizado creo que no puedo calificarlo con otra palabra sino “repugnante”: la capa de Spawn parece hecha con papel crepé, Violator parece coloreado con crayones, al pendentif que brilla con un destello verde se le ve el recuadro donde termina el CGI, el ejército de Hellspawns se mueve como con dos cuadros de animación, y el Infierno y Malebolgia (voz del legendario actor de voz Frank Welker)… ¡Por Cthulhu! ¡Tuve juegos en mi Nintendo 64 que se veían mejor que eso! ¿Por qué rayos deciden hacer un primer plano de Malebolgia cerca del final de la peli si no se veía bien ni de lejos? “¡Salve Señor de las Tinieblas a medio inflar!”

    Y por favor, no caigamos en el “los efectos eran buenos para la época”, porque para cuando se estrenó esta película ya habían salido El quinto elemento (Besson, 1997) y El mundo perdido: Jurassic Park (Spielberg, 1997). Digo, hay varias escenas en las que la pantalla azul se refleja en el cuerpo de Spawn y a las tomas de establecimiento de un ficcionalizado Nueva York se les ven los pixeles. Además, la legendaria Industrial Light & Magic firmó por los efectos visuales de la cinta; aunque, a final de cuentas, el apretado presupuesto y tiempo para realizar la peli obligaron a los productores a contratar a cerca de veinte pequeños estudios independientes en EE.UU., Canadá y Japón para terminar el trabajo a tiempo e ILM sólo realizó las tomas principales.

    Llegados a este punto, ¿qué más puedo decir de esta película? ¿Qué más sobre que Terry Fitzgerald (D.B. Sweeney en un papel que originalmente interpretaría Edward Norton) es blanco cuando en el cómic es negro? ¿Qué más sobre que los detectives Sam Burke y Max “Twitch” Williams son personajes clave en los cómics y en la película apenas si tienen un cameo que se pierde en el Full Screen? ¿Qué más aparte de que en la escena en la que Spawn es derribado en la cocina se le ven las botas debajo del traje? ¿Qué más después de que la cofia de anillas de Cogliostro está hecha con las patas? ¿Qué más aparte de que incluso las pocas tomas que se filmaron en locación parecen haber sido realizadas en estudio?

    Bueno, pues creo que el lado más flaco de la cinta son sus increíblemente pobres edición y montaje. La narrativa de por sí atropellada se vuelve torpe gracias a cortes duros, tomas de reacción que entran casi sin excepción un segundo antes, transiciones que dejan huecos y un montaje de las escenas de peleas que casi parece tener la encomienda de quitarles el poco dinamismo que tienen.

    A pesar de todo lo anterior, la película no está exenta de algunos aciertos y creo que el principal de ellos es el diseño de Spawn. Uno de los principales atractivos de las películas de superhéroes de aquel entonces era el diseño de sus vestuarios pues, aún hoy día, los vistosos trajes de spandex de colores brillantes que aparecen en papel rara vez funcionan en la pantalla grande. En el caso de esta peli, se optó por darle al necrotraje de Spawn ‒que es una idea muy similar a la de Venom en Spider-Man porque fueron creados por la misma persona‒ una apariencia mucho más orgánica que la de su contraparte impresa. Me gusta el montón de texturas que le pusieron y, aunque las apariciones de Spawn enmascarado en pantalla son contadas y breves, creo que la máscara se ve genial con esos ojos verdes luminosos. Me hubiera gustado que saliera más la capa… o que por lo menos se viera bien, y que los picos del traje no parecieran de cartón; pero supongo que en términos generales luce bastante decente.

    El otro acierto que creo que tiene la peli es el soundtrack. Lo cual es irónico, porque en sí mismo es bastante malo; pero en comparación con el resto de la película resulta sobresaliente. La música instrumental usada en la peli es completamente anodina, pero los temas cantados compuestos para el álbum, algunos de los cuales fueron incluidos en la cinta, llaman la atención. Desde el nivel conceptual se trata de un álbum raro, cuya propuesta fue armar duetos entre rockeros y músicos electrónicos con resultados a mi gusto fallidos. Sin embargo, si alguna vez les dio curiosidad saber cómo sonaría un dueto entre Korn y los Dust Brothers, entre Tom Morello y The Prodigy, Metallica con DJ Spooky, o el tema principal de la película, interpretado por Marilyn Manson y los Sneaker Pimps, quizá valdría la pena revisar este álbum. Otras participaciones incluyen a Moby y Orbital.

     Muchos críticos consideraron que, a final de cuentas, el soundtrack simplemente era ruidoso y que estropeaba momentos clave de la peli; pero creo que funciona distanciando un poco al público de la cochinada que está viendo en pantalla. O sea, funciona porque no funciona.

     Originalmente, se planeó que esta cinta fuera la primera parte de una trilogía que continuaría en 1998 con Spawn 2 y Spawn 3: The Final Battle en 1999. Muchos elementos de la película sugieren la línea argumental que seguirían las secuelas, como la aparición de Angela (Laura Stepp) en la escena de la fiesta ‒fíjense bien, está ahí: vestido verde con rombos blancos‒ o el hecho de que Malebolgia no es derrotado al final. Sin embargo, la pobre recepción de público ‒la cinta recaudó apenas la mitad de su presupuesto en su fin de semana de estreno‒ y crítica aunada a la insatisfacción de Todd McFarlane con el resultado final de la cinta cerraron las puertas a cualquier secuela inmediata y sumergieron a una secuela a mediano plazo en un infierno de pre-producción que continuó hasta el año pasado.

    En 2007, McFarlane anunció sus planes para una nueva película, que sería un reboot, se centraría más en los personajes de los detectives Sam y Twitch, y tendría un tono más similar al de un thriller con elementos de horror. Durante una temporada se rumoró que dicha película no sería Live-Action; sino una cinta animada que sería distibuida por Film Roman (responsables por series animadas como Los reyes de la colina [1997-2010], X-Men: Evolution [2000-2003], Garfield y sus amigos [1988-1995] o Los Simpson [1989- ]) directo al mercado casero. Sin emabrgo, el proyecto nunca vio la luz y fue hasta esta década, con el boom de las cintas de superhéroes y el éxito viral del cortometraje Spawn: The Recall (Paris, 2014) que rondó por Youtube, que McFarlane anunció oficialmente su proyecto de una nueva película de Spawn, para la cual terminó de escribir el guión el año pasado y que, en teoría, estaría estrenándose este año o el próximo.

    Quizá lo único verdaderamente bueno que engendró la película de Spawn fue la serie de figuras de acción alusivas, de la cual hablé en mi artículo sobre las mejores figuras de acción basadas en películas.

    También, según yo, ésta es la primera película de superhéroes con un actor afroamericano en el rol principal, y ‒corríjanme si me equivoco, por favor‒ la primera película basada en un comic en la que el autor de dicho comic hace un cameo.

PARA LA TRIVIA: Originalmente, se había pensado en Tim Burton para dirigir la película de Spawn, pero nunca se concretó. La segunda opción fue Alex Proyas, quien abandonó el proyecto para dirigir Ciudad en tinieblas (1998) ‒¡Y qué bueno!‒. Del mismo modo, nombres como Wesley Snipes, Cuba Gooding Jr., Will Smith, Denzel Washington y Samuel L. Jackson, entre muchos otros, fueron barajados como candidatos para interpretar a Al Simmons/Spawn.

Si pudiera bajarle puntos extra por los efectos especiales terribles y la edición horrenda, lo haría.

    Cuando le den play al trailer, por favor noten que utilizaron el maravilloso soundtrack de Patrick Doyle para «Frankenstein, de Mary Shelley» (Branagh, 1994) para musicalizarlo.

Y ahora, como parte de este artículo conmemorativo y porque ya saben que me encanta hacer cuadros, tablas y ese tipo de cosas, aquí presento un sumario con los eventos más importantes sucedidos en el cómic de Spawn hasta la fecha. Ésta será la primera de cuatro partes. Salvo que se indique otra cosa, la numeración corresponde a la edición mexicana.

No.0	Lo mismo que el número 1, pero en edición limitada conmemorativa de la visita de Todd McFarlane a México en el marco de la MECyF 97.
No.1	Al Simmons, el nuevo Spawn aparece en la Tierra. Primera aparición de Al Simmons, Jason Wynn, los detectives Sam y Twitch, y el demonio Malebolgia. Primera aparición del reloj de los poderes de Spawn. Cuando éste llegue a 0, el alma de Al Simmons se perderá para siempre.
No. 2	Primera aparición de Payaso y su forma demoniaca Violator.
No. 3	Supuesta primera aparición de Jim Downing. Spawn se entera de que su viuda, Wanda Blake, se casó con su mejor amigo, Terry Fitzgerald, y tienen una hija, Cyan.
No. 5	Primera aparición del asesino serial de niños Billy Kincaid, quien es asesinado por Spawn y su cadáver botado en la oficina de Sam y Twitch. El jefe de policía Banks estará haciéndoles la vida imposible de ahora en adelante.
No. 6	El líder mafioso Tony Twist manda traer al sicario cyborg Overtkill para eliminar a Spawn.
No. 8	Billy Kincaid llega al Infierno. Primera aparición de Vindicator y primera mención de los hermanos Phlebiac (hermanos de Violator). Escritor invitado: Alan Moore.
No. 9	Primera aparición de Spawn medieval. Primera aparición del ángel Gabrielle, la embajadora del Cielo en la Tierra. Primera aparición de Angela, el ángel cazador de Spawns, quien pierde su lanza en un enfrentamiento contra Spawn. Primera aparición de Cogliostro. Escritor invitado: Neil Gaiman.
No. 10 USA	Spawn llega al Limbo en el que hace un crossover con Cerebus the Aardvark. Escritor invitado Dave Sim. Este número no se publicó en México por cuestiones de derechos de autor, creando un desfase en la numeración.
No. 10	Dos pandillas se disputan el callejón de Spawn. Escritor invitado: Frank Miller.
No. 11	Primera aparición de la abuela Blake, quien es invidente y cree que Al Simmons regresó como un ángel guardián, y del asesino de Simmons, el mercenario Chapel.
No. 12	Crossover Spawn vs Youngblood. Spawn se enfrenta a Chapel, quien pierde la razón.
No. 13	Una historia original de Spawn Medieval. Comeinza a publicarse Spawn Bible, una serie de dossiers de los personajes del cómic bellamente ilustrada por Greg Capullo.
No. 15	Saga “Reflexiones”, escrita por Grant Morrison. Inicia la colaboración de Greg Capullo en el arte. Primera aparición del Anti-Spawn, Jason Wynn, en un hueco argumental que tardaría más de dos décadas en resolverse.
No. 18	Spawn y Harry Houdini.
Especial	Spawn vs Batman. Escrita por Frank Miller. Termina con Batman lanzándole un batibúmerang a Spawn en el rostro.
No. 20	El indigente Bobby cose la cara de Spawn con una agujeta, dándole el look conocido por los fans como “Hambuger Head”.
No. 21	Regresa Overtkill.
Especial	Miniserie Violator. Escrita por Alan Moore. Arte de Bart Sears y Greg Capullo, tintas de Mark Pennington. Los hermanos Phlebiac, Vindicator, Vandalizer, Vaporizer y Vacillator deciden castigar a su hermano menor Violator por haber deshonrado a la familia. Tony Twist envía al mercenario psicópata Admonisher a eliminar a Payaso.
No. 24	Artista invitado: Mark Silvestri. Primera aparición del mutante Tremor, un sicario convertido en monstruo por los experimentos que Tony Twist hizo con él.
No. 25	Gabrielle se entrevista con Spawn para saber el paradero de la lanza de Angela.
No. 26	Primera aparición de The Curse, un fanático religioso con partes biónicas.
Especial	Miniserie Angela. Escrita por Neil Gaiman y dibujada por Greg Capullo. En la ciudad celestial de Elysium, Angela es llevada a juicio por Gabrielle bajo cargos de traición por haber abandonado su lanza. Las amigas de Angela, Anahita y Kwan Yin, llevan a Spawn al Cielo como testigo; pero todo sale mal y Angela y Spawn deben escapar, recibiendo este último un disparo de energía celestial que casi mata su necrotraje. Hay un affair entre Spawn y Angela, quien es declarada renegada por el Cielo.
No. 28	Spawn regresa del Cielo al Medio Oeste estadounidense. Encuentra a Andy y Eddie Frank, dos niños que son maltratados por su padre abusivo.
No. 29	Spawn vs el KKK.
No. 30	El personaje conocido como Anti-Spawn es rebautizado como Redeemer. Nace un nuevo Redeemer encarnado en el buen samaritano Phil Timper. Redeemer derrota a Spawn y el necrotraje muere para después mutar. Primera aparición del ángel Raphaelle, quien sustituye a Gabrielle.
No. 32	Regresa Violator.
Especial	Miniserie BloodFeud. Escrita por Alan Moore. Lápices de Tony Daniel, tintas de Kevin Conrad. Sam y Twitch investigan violentos asesinatos. A la ciudad llega el cazador de monstruos John Sansker, quien señala a Spawn como el responsable y lo acusa de ser un vampiro.
No. 33	Payaso pierde la capacidad de transformarse en Violator. Primera aparición del demente conocido como The Freak.
No. 34	Spawn se enfrenta a Jason Wynn, quien es rescatado por Terry Fitzgerald.
No. 35	Spawn revela su identidad a Wanda Blake, pero ella no le cree.
No. 36	The Freak pide ayuda a Spawn para vengarse contra el científico que lo usó como conejillo de Indias.
No. 37	Comienza la colaboración del artista Tony Daniel. Primera aparición de Cy-Gor, un gorila con partes biónicas creado con el cerebro del pupilo de Al Simmons, Stephen Smith. Cy-Gor escapa del laboratorio en el que estaba encerrado.
No. 38	El inmundo Especial de Navidad.
No. 39	Regresa The Curse.
No. 42	Spawn aprende a controlar a las criaturas de la noche. Tras ser amenazado por Jason Wynn, el jefe Banks se suicida.
No. 43	Primera aparición del ángel cazador Tiffany.
No. 45	Regresa Tremor, quien pide ayuda a Spawn para rescatar a su hermano de Tony Twist.
No. 47	Spawn deja los callejones. Payaso se alía con Jason Wynn.
No. 48	Comienza la colaboración del Dream Team de Spawn: Lápices de Greg Capullo, tintas de Danny Miki. Spawn pelea contra su necrotraje y es rescatado por Cogliostro. Terry tiene un tumor en el cerebro y sufre un accidente. Cy-Gor llega a Manhattan.
No. 49	En EE.UU. este número fue parte del 50, que fue un número doble. Spawn salva a Terry y Cyan conserva la agujeta de Spawn como recuerdo, desarrollando un vínculo psíquico con él.
No.50	Spawn desciende al Infierno. A partir de aquí, se empata la numeración de la edición mexicana con la original.
No. 51	En el cuarto nivel del Infierno, Spawn pierde su corazón humano.
No. 52	Crossover Spawn y Savage Dragon.
No. 53	Spawn se enfrenta a Billy Kincaid, ahora convertido en Hellspawn.
No. 56	1ª aparición del mentor de Al Simmons, el mayor Forsberg, quien ha estado pudriéndose en un calabozo desde los 70. Es rescatado por Spawn.
No. 57	Primera colaboración del artista Chance Wolf en las tintas. Spawn se enfrenta a Cy-Gor (por fin).
No. 58	Los hermanos Frank llegan a Manhattan tras escaparse del reformatorio.
No. 59	Payaso secuestra a Cyan.
No. 60	Spawn mata a Payaso.

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[1] Tomado de su sitio web, http://www.rogerebert.com/reviews/spawn-1997 . La traducción es mía.